El Colegio de Ópticos-Optometristas de Galicia recuerda, en el Día de las Gafas de Sol, la importancia del cuidado de los ojos en el período estival. Explica que el sistema visual está continuamente expuesto a radiación solar, que puede ser de dos tipos: ultravioleta (UV), que produce daños tras un período de exposición, e infrarroja (IR), pudiendo ocasionar lesiones térmicas instantáneas. Además, señala que esto cambia dependiendo de la geografía, la latitud, la altitud e incluso las superficies: la nieve refleja un 80% los rayos de sol, mientras que el agua lo hace un 20%.
Para quienes usen lentes de contacto, el Colegio aconseja mejor el uso de lentes desechables diarias, ya que las partículas de polvo, arena o incluso las bacterias pueden quedarse en la lentilla y mantenerse en contacto con el globo ocular.
Por otro lado, el Colegio apunta que se debe tener cuidado con el viento, sea por desplazamiento en moto, bicicleta o coche descapotable, que puede ocasionar la entrada de partículas o cuerpos extraños que generen molestias o irritación. También hace un apunte por el aire acondicionado, dado que produce sequedad en los ojos, para lo que se recomienda el uso de gotas humectantes o lágrimas artificiales que mantengan el ojo hidratado de forma más eficaz.
Es importante que la protección de la vista perdure en días nublados, ya que aunque no se vea el sol, la luz se refleja de forma más difusa. También hay que extremar la protección si se viaja a la montaña, ya que la radiación aumenta entre un 10 y un 12% por cada 1.000 metros de subida, pudiendo producir quemaduras y lesiones en la vista.
Por último, el Colegio destaca que se debe poner especial atención en la protección de grupos vulnerables como niños y adolescentes, tercera edad, mujeres embarazadas y personas que recientemente se han sometido a operaciones de cataratas o cirugía refractiva, que pueden ser más sensibles a la luz ultravioleta.