Sobre la compensación de la presbicia hay que hacer alguna precisión:
Hay personas que son reacias a utilizar las gafas de cerca por primera vez, aduciendo que si se acostumbran a ellas la progresión de la presbicia es mucho más rápida y ya no pueden soltar ni un segundo sus lentes correctoras. Esta afirmación no es más que uno de tantos mitos relacionados con la salud. Lo que sucede es que una vez que la presbicia se pone de manifiesto, su avance es "implacable" y la visión de cerca empeora paulatinamente con el paso de los años, se usen o no se usen lentes compensadoras, con el agravante de estar haciendo un esfuerzo suplementario que el ojo ya no está en disposición de soportar.
También sucede que el cerebro humano es sumamente sabio y una vez que comprueba que con gafas puede ver mucho mejor, leer mejor y con más facilidad un libro y realizar más fácilmente cualquier actividad en visión próxima, luego es difícil "convencerle" de lo contrario. Lo más recomendable es la utilización de unas gafas o lentes de contacto compensadoras desde los primeros indicios de vista cansada; con ello tendremos una mejor calidad de vida y nuestro rendimiento visual será óptimo.