Este trastorno de la visión binocular tiene como consecuencia, no sólo la supresión de las imágenes recibidas por uno de los dos ojos, sino que además el ojo no dominante puede convertirse en un “ojo vago” (ambliopía).
Según hacia dónde se dirijan los ojos, el estrabismo se divide en:
- Estrabismo convergente: El ojo no dominante se desvía hacia dentro; es también el tipo más común de estrabismo en los niños.
- Estrabismo divergente: El ojo no dominante se desvía hacia fuera.
- Estrabismo vertical: El ojo se desvía hacia arriba o hacia abajo.
- Estrabismo intermitente: estrabismo que no está presente todo el tiempo, sino que aparece en algunas ocasiones.