Una delegación de COOCYL, encabezada por el decano Luis Ángel Merino, mantuvo un encuentro con el director general de Asistencia Sanitaria, Francisco Javier Vadillo, para impulsar la presencia de estos profesionales de la atención primaria visual en centros de salud y hospitales de la comunidad.
El Colegio de Ópticos-Optometristas de Castilla y León (COOCYL) ha sido el primer colectivo sanitario en mantener una reunión de trabajo con el recientemente nombrado director general de Asistencia Sanitaria de la Consejería de Sanidad del Gobierno autonómico, Francisco Javier Vadillo. Un encuentro “positivo” que supone un nuevo paso para seguir avanzando en el diálogo y la colaboración necesarias para lograr la inclusión de los ópticos-optometristas en la salud pública castellanoleonesa.
Así lo ha indicado el decano de COOCYL, Luis Ángel Merino, que acudió al encuentro acompañado por el vocal de la junta directiva y coordinador del Grado de Óptica y Optometría de la Universidad de Valladolid (UVa), Raúl Martín Herranz; el responsable de los servicios jurídicos del Colegio, Alberto Crespo; y el vocal de Óptica del Colegio Oficial de Farmacéuticos de Valladolid, Ignacio José Ayestarán. “Hemos encontrado una actitud muy proactiva por parte del director general, muy consciente de que es necesario contar con los ópticos-optometristas para reducir las listas de espera”, ha añadido el decano.
Además, Francisco Javier Vadillo había tomado en consideración el informe sobre la ‘Ampliación de cartera de servicios
en salud visual: una aproximación de evaluación económica’, entregado por COOCYL a los anteriores responsables sanitarios, en el que se aplica una traslación de las cifras recogidas en un estudio nacional elaborado por el Consejo General de Colegios de Ópticos-Optometristas y la Sociedad Española de Optometría, teniendo en cuenta que la población de Castilla y León es
el 5,13% del total de la española.
En este estudio, se establece que, tanto mediante el establecimiento de unidades de Optometría en ambulatorios como en el seno de los servicios de Oftalmología de los diferentes hospitales, el ahorro para Sacyl de esta ampliación de la cartera de servicios en salud visual sería considerable.
En concreto, de acuerdo con las derivaciones desde Atención Primaria, solo por problemas de agudeza visual –que se cuantifican en 74.000 personas al año en la población pediátrica y de 63.100 en la población adulta–, serían necesarias
31 unidades de Optometría en Castilla y León (15 para atención pediátrica y 16 para adultos), con un coste anual de
59.309 cada una, lo que supondría un desembolso de 1.838.579 euros, casi la mitad de los 3.642.300 euros de coste
estimado en la actualidad.
En la reunión, también se debatió sobre las posibilidades que se abren con la inclusión de los estudios de Grado en el
área de Ciencias de la Salud, lo que posibilitará en breve la realización de prácticas de los alumnos en los hospitales
universitarios de la comunidad. Con esta formación, se establecería un primer punto de partida para contar con profesionales
formados que podrían incorporarse a las nuevas Unidades de Optometría de Atención Primaria.
Así, como profesionales en la atención primaria de la salud visual podrían realizar un primer cribado antes de la derivación
de los pacientes a los servicios de Oftalmología, teniendo en cuenta, además, que los datos recogidos en el mencionado
informe indican que en torno al 76% de los motivos de derivación por razones oftalmológicas en pediatría se corresponden
con problemas relacionados con la agudeza visual, un porcentaje que se eleva por encima del 30% en el caso
de los adultos.
Esta primera toma de contacto con la Consejería de Sanidad del nuevo Gobierno de Castilla y León, que tomó posesión
hace escasamente un mes, forma parte de una completa estrategia de COOCYL en favor de una mejora de la calidad
asistencial en la salud visual de los ciudadanos y de la reducción de las listas de espera en Oftalmología, que, según
la última estadística oficial, supera las 32.000 personas.
Con este objetivo, durante todo 2022 se han difundido las ventajas que supondría la incorporación del óptico-optometrista
en la salud pública de Castilla y León, como ya han hecho en otras 11 comunidades autónomas, a través de una serie de entrevistas en el programa ‘Vamos a Ver’ de La 7 de Castilla y León Televisión. En este programa, se ha contado con la colaboración de pediatras y oftalmólogos como profesionales que viven día a día la necesidad de contar con los ópticos-optometristas para avanzar en la mejora de la salud visual de la población.
Así lo ha indicado el decano de COOCYL, Luis Ángel Merino, que acudió al encuentro acompañado por el vocal de la junta directiva y coordinador del Grado de Óptica y Optometría de la Universidad de Valladolid (UVa), Raúl Martín Herranz; el responsable de los servicios jurídicos del Colegio, Alberto Crespo; y el vocal de Óptica del Colegio Oficial de Farmacéuticos de Valladolid, Ignacio José Ayestarán. “Hemos encontrado una actitud muy proactiva por parte del director general, muy consciente de que es necesario contar con los ópticos-optometristas para reducir las listas de espera”, ha añadido el decano.
Además, Francisco Javier Vadillo había tomado en consideración el informe sobre la ‘Ampliación de cartera de servicios
en salud visual: una aproximación de evaluación económica’, entregado por COOCYL a los anteriores responsables sanitarios, en el que se aplica una traslación de las cifras recogidas en un estudio nacional elaborado por el Consejo General de Colegios de Ópticos-Optometristas y la Sociedad Española de Optometría, teniendo en cuenta que la población de Castilla y León es
el 5,13% del total de la española.
En este estudio, se establece que, tanto mediante el establecimiento de unidades de Optometría en ambulatorios como en el seno de los servicios de Oftalmología de los diferentes hospitales, el ahorro para Sacyl de esta ampliación de la cartera de servicios en salud visual sería considerable.
En concreto, de acuerdo con las derivaciones desde Atención Primaria, solo por problemas de agudeza visual –que se cuantifican en 74.000 personas al año en la población pediátrica y de 63.100 en la población adulta–, serían necesarias
31 unidades de Optometría en Castilla y León (15 para atención pediátrica y 16 para adultos), con un coste anual de
59.309 cada una, lo que supondría un desembolso de 1.838.579 euros, casi la mitad de los 3.642.300 euros de coste
estimado en la actualidad.
En la reunión, también se debatió sobre las posibilidades que se abren con la inclusión de los estudios de Grado en el
área de Ciencias de la Salud, lo que posibilitará en breve la realización de prácticas de los alumnos en los hospitales
universitarios de la comunidad. Con esta formación, se establecería un primer punto de partida para contar con profesionales
formados que podrían incorporarse a las nuevas Unidades de Optometría de Atención Primaria.
Así, como profesionales en la atención primaria de la salud visual podrían realizar un primer cribado antes de la derivación
de los pacientes a los servicios de Oftalmología, teniendo en cuenta, además, que los datos recogidos en el mencionado
informe indican que en torno al 76% de los motivos de derivación por razones oftalmológicas en pediatría se corresponden
con problemas relacionados con la agudeza visual, un porcentaje que se eleva por encima del 30% en el caso
de los adultos.
Esta primera toma de contacto con la Consejería de Sanidad del nuevo Gobierno de Castilla y León, que tomó posesión
hace escasamente un mes, forma parte de una completa estrategia de COOCYL en favor de una mejora de la calidad
asistencial en la salud visual de los ciudadanos y de la reducción de las listas de espera en Oftalmología, que, según
la última estadística oficial, supera las 32.000 personas.
Con este objetivo, durante todo 2022 se han difundido las ventajas que supondría la incorporación del óptico-optometrista
en la salud pública de Castilla y León, como ya han hecho en otras 11 comunidades autónomas, a través de una serie de entrevistas en el programa ‘Vamos a Ver’ de La 7 de Castilla y León Televisión. En este programa, se ha contado con la colaboración de pediatras y oftalmólogos como profesionales que viven día a día la necesidad de contar con los ópticos-optometristas para avanzar en la mejora de la salud visual de la población.