Uno de los problemas que nos pueden pasar factura con la vuelta al trabajo son los dolores y tensiones en la espalda o cuello, en la mayor parte de las veces ocasionados por adoptar una mala postura a la hora de trabajar.
La ergonomía postural es muy importante en el trabajo con el ordenador, ya que pasamos muchas horas seguidas sentados, y de la postura que adoptemos dependerá evitar problemas como los anteriormente citados. Para ello, toma nota de los siguientes consejos sobre ergonomía postural:
- Apoya los pies planos sobre el suelo (o en un reposapiés o plinto ligeramente inclinado), con las rodillas dobladas formado un ángulo de aproximadamente 90 grados o más.
- No subas demasiado el asiento: el asiento debe soportar las piernas sin ejercer una presión excesiva sobre la parte posterior de los muslos.
- Ajusta bien la espalda contra el asiento para que se adapte perfectamente al perfil de la columna vertebral. El ángulo que se forma entre el muslo y el torso debe rondar los 90 grados.
- Extiende las muñecas y las manos casi rectas desde el codo hasta la fila central de teclas del teclado (es decir, las que representan las letras A, S, D, F, etcétera).
- Utiliza mesas de unos 66 centímetros de alto, ya que resultan más cómodas.
- Sitúa el monitor a una distancia aproximada de 50-65 centímetros en función de su tamaño y de las condiciones visuales.
- Sitúa el monitor y el teclado alineados frente a ti.
- Coloca la parte superior del monitor ligeramente por debajo del nivel de tus ojos e inclina la pantalla en un ángulo de 10-20 grados.
- Pon los soportes o atriles para los documentos cerca de la pantalla a la misma distancia de visión.