El tratamiento del estrabismo está dirigido fundamentalmente a:
- Evitar la ambliopía: para ello se recetará unas gafas que compensen el problema óptico (si lo presenta), y se ocluirá con un parche el ojo sano para que el otro desarrolle una mejor visión. En ocasiones los niños se oponen al uso de los "parches", pero son la única forma de evitar la ambliopía.
- Enderezar los ojos: algunos estrabismos asociados a hipermetropías pueden corregirse parcial o totalmente con lentes, pero lo más frecuente es el tratamiento con cirugía. Por medio de esta, se puede obtener un "alineamiento" de los ojos y una mirada estéticamente aceptable.
- Restaurar la visión binocular: esto se logra con los tratamientos anteriores, pues al obtener el alineamiento de ambos ojos y una visión similar se puede alcanzar una visión binocular muy cercana a la normal.
El tratamiento depende del tipo de estrabismo. En todos los casos, dicho tratamiento debe estar dirigido por un especialista y el primer punto que se debe tratar es la compensación de los defectos de refracción que el paciente estrábico pueda tener.
Los bebés no pueden ser considerados estrábicos hasta que no tienen seis o siete meses. Pero si perduran los signos del estrabismo pasado ese tiempo, se debe acudir a los especialistas de la visión tan pronto como sea posible con el fin de obtener los mejores resultados. Es muy importante en estos casos la mentalización y trabajo a posteriori de los padres.
En cualquier caso hay que comenzar por la técnica de la oclusión, entre otras, para poder entrenar y mejorar el ojo desviado.También son aconsejables los ejercicios dirigidos por el óptico-optometrista de deslumbramiento retiniano, para que sea estimulada la fijación en la fóvea. En todos los casos de estrabismos es muy necesaria la constancia y la regularidad para conseguir llevar a buen término el programa de reeducación visual.
Si llegara el caso, se recurriría a tratamientos farmacológicos (infiltración de toxina botulínica que actúa paralizando los músculos oculomotores) e incluso a la cirugía por parte del oftalmólogo, acompañada generalmente con algún entrenamiento visual que ayude a desarrollar la fusión y la visión en tres dimensiones (estereopsis).
El alineamiento de los ojos puede lograrse con cirugía en el 80 por ciento de los casos. No obstante, si se detecta el estrabismo precozmente, la mayoría puede llevarse a cabomediante corrección óptica en gafas, oclusiones con parches y ejercicios musculares. La intervención quirúrgica — únicamente por unamejora estética — se reserva a los casos en los que el ángulo de desviación del ojo lo exige.